¿Cómo devolvemos el poder a la ciudadanía para que estén al centro de las políticas públicas?
Con el objetivo de promover gobiernos locales más abiertos y participativos en América Latina, Ciudadanía Inteligente creo Abre Alcaldías, una instancia de fortalecimiento de capacidades a personas parte de gobiernos locales, equipos de trabajo de autoridades, integrantes de secretarías o personas con trabajo directo con la comunidad, para la promoción de una gestión participativa, integradora y enfocada en la ciudadanía.
Red Ciudadana una asociación sin fines de lucro con el objetivo de promover la participación ciudadana, auditoría social, fortalecimiento institucional y transparencia tiene la oportunidad de participar en este proyecto como organización co-implementadora. El proyecto consta de 4 fases, formación, diagnóstico local, planes personalizados y acompañamiento e intercambio. El jueves 18 de agosto del presente año se realizó la última sesión de la primera fase, la misma fue acompañada de grandes reflexiones, aprendizaje e invitados, que el presente blog busca exponer.
Habiendo dicho lo anterior, en la primera sesión hablamos sobre la “Desconfianza institucional: causas y raíces” donde todas las organizaciones co-implementadoras de Colombia, México y Guatemala expusieron esas causas y raíces que generan una desconfianza enraizada en la ciudadanía hacia sus instituciones. Esto acompañado de datos pero también de valiosas reflexiones y estrategias para cómo combatir esta problemática.
En la segunda sesión se habló de “Estándares y recomendaciones para la apertura” la misma fue dividida en exponer que es Gobierno Abierto donde con la ayuda de la participación de los funcionarios y funcionarias se indicó que viene siendo un nuevo modelo donde la transparencia se vuelve clave en la gestión pública, asimismo, se abre hacia el trabajo y creación de políticas públicas al lado de la ciudadanía.
Durante la misma también se habló puntualmente de estándares y recomendaciones para un gobierno abierto, entre ellos, se mencionó tomar en cuenta los derechos humanos, los contextos, el género y la apertura para construir al lado de la ciudadanía, tomando mejores decisiones y políticas públicas.
Ahora bien, en la 3ra sesión “Diseño, monitoreo y evaluación de políticas públicas” se conversó sobre diseño, monitoreo y evaluación de proyectos con funcionarios públicos de latinoamérica. Se compartieron buenas prácticas de gestión participativa, abierta e innovadora con funcionarios de Gobiernos locales de Guatemala, Colombia y México.
Finalmente, en la 4ta y última sesión se tuvo como invitado a Javier Arteaga quien compartió su experiencia trabajando con la estrategia design thinking, entendiéndolo como un enfoque innovador en la administración pública para diseñar soluciones creativas a problemas públicos con interacción con los múltiples actores involucrados.
Con esta última sesión los y las participantes han comenzado a pensar una actividad, normativa o política específica que quieran impulsar, de acuerdo a su contexto. Este diagnóstico local permitirá generar acciones de cambio personalizadas y alcanzables para cada territorio, favoreciendo la participación ciudadana y la co-construcción y seguir avanzando hacia la última fase de Abre Alcaldías de acompañamiento en la implementación.
Desde Red Ciudadana reconocemos que la adopción de un enfoque de gestión participativa no ha sido totalmente posible en los gobiernos locales guatemaltecos, porque se sigue manteniendo una perspectiva tradicional de la administración pública, que no ha logrado superar su enfoque normativo y de control. Sin embargo, esta situación ha sido en parte resultado de las limitaciones en su capacidad institucional y administrativa que no le ha permitido innovar y fortalecer capacidades internas para responder de manera óptima a las necesidades de la ciudadanía.
Los mayores desafíos que resaltan en la administración local son la:
- Brecha de acceso.
- Resistencia al cambio.
- Desafíos institucionales: brecha, falta de recursos y capacidades.
Ante ello, las organizaciones civiles guatemaltecas son una vía clave ya que tienen un papel estratégico que desempeñar, para influir y proponer una agenda de desarrollo local, que responda a los intereses sociales pero que, a su vez, está sujeta a que ambos entes superen algunos de los desafíos que tienen los gobiernos locales: como llegar a las áreas rurales, falta de capacidades y recursos. Asimismo, el lado negativo como lo es el clientelismo, oportunismo, falta de transparencia, corrupción; problemas que, en su conjunto, reflejan la ausencia de capacidad social y de legitimidad.